La primera vez que tuve noticia de esta festividad debió de ser en alguna película americana. Era gracioso ver a los niños disfrazados visitando las casas con el “truco o trato”. Pero era completamente desconocido en mi entorno.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte, y cada vez más, se ven calabazas en los escaparates, tartas y galletas con temática Halloween, niños disfrazados,… Los jóvenes, que se apuntan a todo con tal de ir de fiesta, también salen disfrazados en Halloween.
A mí, personalmente, me pilla tarde y, la verdad, si un grupo de niños se acerca por mi casa preguntándome: “Truco o trato”, no voy a saber qué hacer.
Aunque no os voy a negar que alguna de mis hijas me ha liado alguna vez para hacer una calabaza de Halloween...
Y aquí un escaparate de una tienda de tartas de fondant.
Supongo que será otro de los resultados de la globalización.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte, y cada vez más, se ven calabazas en los escaparates, tartas y galletas con temática Halloween, niños disfrazados,… Los jóvenes, que se apuntan a todo con tal de ir de fiesta, también salen disfrazados en Halloween.
A mí, personalmente, me pilla tarde y, la verdad, si un grupo de niños se acerca por mi casa preguntándome: “Truco o trato”, no voy a saber qué hacer.
Aunque no os voy a negar que alguna de mis hijas me ha liado alguna vez para hacer una calabaza de Halloween...
Y aquí un escaparate de una tienda de tartas de fondant.
Supongo que será otro de los resultados de la globalización.
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