Tedio y estrés

He seguido pensando sobre el estrés y el post de hoy viene un poco al hilo del que subí hace unos días.
Hablamos mucho sobre el estrés y sabemos que es malo para la salud. Los médicos nos insisten en ello, aunque en realidad lo que es malo, realmente, es el estrés en exceso. Un poco de estrés es bueno, nos ayuda a darle interés a nuestra vida. De hecho, estoy completamente de acuerdo con la siguiente frase de Ramón Pérez de Villaamil: “Es imposible tener una vida con retos sin estrés. Y sin retos la vida es un rollo”. Aunque, a veces, es difícil encontrar el punto de equilibrio entre el estrés en exceso (*) y el tedio.
Si tu vida está instalada en la rutina y te resulta aburrida, intenta salir de tu zona de confort, de las zonas que conoces, de lo que sabes hacer,… Busca la ocasión (**) de visitar lugares nuevos, de conocer personas, de aprender,… En algunos casos puede ser que te arrepientas y no quieras repetir pero en muchos otros casos puedes encontrar experiencias muy interesantes y plenas. ¡Atrévete!
Sin embargo, si tienes la sensación de que los días no te llegan, de que tienes todo programado, de que te gustaría tener un poco de tiempo para ti o hacer cosas nuevas pero no puedes… No esperes más. ¡Párate y piensa! ¿De verdad te satisface todo lo que haces? ¿No podrías prescindir de algunas de las actividades y sustituirlas por alguna nueva que te apetezca más? ¿Quizá preferirías tener un poco más de tiempo libre? ¿Te apetece cambiar tu vida?
Estamos a comienzos de año, todavía estás a tiempo de decidir a qué vas a dedicar tus horas de ocio. Intenta ser feliz.

(*) es el que no podemos manejar y nos puede causar malestar físico, e incluso psíquico, real
(**) en algunos casos será necesario que te obligues un poco